Sara Garrido, del Comité de Manejo de la sardina, recalcó que:”Oceana puede ser muy conservacionista, pero el impacto social de la baja de cuota no es preocupación de nadie, por lo tanto dejen que nosotros trabajemos y administremos el recurso porque somos los artesanales los únicos que les podemos garantizar sustentabilidad a la sardina anchoveta.

Con extrañeza e incomodidad ante la facilidad con que Oceana intervino, sin que nadie de la pesca artesanal le pidiera ni necesitara de su opinión,  en la problemática de la sardina artesanal, reaccionó Sara Garrido, integrante del Comité de Manejo de la Sardina y dirigente de la Federación Regional de Pescadores Artesanales del Biobío, Fedepes.

Oceana difundió un comunicado de prensa en el que se alegra por la decisión del gobierno de entregar un aumento de cuota basado en un resultado de debate en el Comité Científico, con datos de enero.

El aumento está lejos de lo que 31 organizaciones de pescadores pelágicos de la Región del Biobío pidieron, con antecedentes científicos actualizados y entregando datos socioeconómicos y empíricos. Uno de ellos es el de 214 mil personas dependiendo de la pesquería en la región, el que utiliza Oceana en su nota. Destacar que Fedepes es una de las 31 organizaciones peticionarias de cuota real. Respecto de esta solicitud todavía no se ha reunido el CC a analizarla, hasta donde hay noticias.

Sara Garrido, con conocimiento de causa desde su participación en el Comité de Manejo, considera que Liesbeth van der  Meer, directora ejecutiva de Oceana, equivocó el norte y sólo aporta a enrarecer un debate complejo y difícil en el que, de momento, Oceana debiera haberse abstenido de participar por mínimo respeto al impacto que provoca la baja de cuota en miles de familias de pescadores.

Las circunstancias, enfatizó, son que se está pidiendo autorización de capturar más porque hay recurso disponible, el que está efectivamente en condiciones de ser extraído, “porque la pesquería de la sardina está sana en razón de que el 78% de ella está en manos de la pesca artesanal, que la ha cuidado con esmero durante años para que sea sustentable”. Sara Garrido agregó que en el Comité de Manejo, inclusive, la labor va más delante de lo que está ONG piensa, pues se está trabajando en un programa de mitigación del descarte, prueba de la preocupación de los pescadores  artesanales porque este recurso sea sustentable y se mantenga en el tiempo.

Llamó a Oceana a preocuparse de temas como el arrastre, pero: ”a nosotros, los artesanales, no vengan ONGs y grupos que hablan desde una perspectiva bien alejada de nuestra realidad a decirnos cómo tenemos que administrar un recurso que está sustentable porque está en manos nuestras. La sardina se halla en plena explotación, o sea está sana, por lo tanto la “preocupación, el interés” de Oceana debe ir a temas como la recuperación de pesquerías colapsadas, sobrexplotadas, no sobre un recurso que es de los artesanales y está sano”

La integrante del Comité de Manejo recalcó que:”Oceana puede ser muy conservacionista, pero el impacto social de la baja de cuota no es preocupación de nadie, por lo tanto dejen que nosotros trabajemos y administremos el recurso porque somos nosotros los artesanales los únicos que les podemos garantizar  sustentabilidad a la sardina anchoveta”.

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