Criticó ausencia de Calidad en la propuesta.
En medio de las dudas que origina la propuesta, el diputado Bernardo Berger cuestionó el real aporte que podría hacer al mejoramiento de la Calidad, la reforma anunciada anoche por la Presidenta Michelle Bachelet para la educación superior en Chile.
“Hasta ahora las intervenciones del Ejecutivo han estado carentes del objetivo de dotar de calidad a la educación pública, que era la demanda central de la ciudadanía, y una vez más el concepto queda en segundo plano en esta nueva reforma que, así como ha sido enunciada, abre más rechazos que apoyos, más preguntas que certezas”, aseguró el parlamentario.
A juicio del parlamentario, es preocupante asimismo que nuevamente el gobierno ingrese un proyecto “por cumplir”, pero “que al parecer no está maduro, que no establece claramente la vinculación de la reforma con la calidad, que no señala específicamente la continuidad ni la coherencia que uno esperaría en relación al resto del sistema educativo nacional, y para más agravar, que no cuenta con el respaldo ni de los propios supuestos beneficiarios que son los estudiantes, ni de las comunidades académicas ni, en definitiva, de las propias universidades”.
“Al gobierno en materia de educación le ha faltado una vez más claridad de objetivos: quiere reformar la educación, pero no parece tener claro hacia dónde quiere llevar la micro. Se ha quedado pegado en las definiciones de propiedad, gratuidad y lucro superadas en el mundo hace décadas, como si ahí se agotara la visión y la tarea de la educación superior en Chile”, sentenció.
Berger lamentó finalmente que la propuesta entregada anoche en cadena nacional por la mandataria omitiera temas de fondo como el rol que se espera de las universidades en el desarrollo nacional y los caminos para estructurarlo, la calidad como premisa fundamental de la gestión superior, no abordara el desarrollo de la docencia ni de la investigación académica tanto en su forma como en su fondo, y no estableciera con exactitud el papel diferenciador que debieran cumplir las casas de educación estatales, más allá del incremento o no en su financiamiento.
Respecto a la nueva institucionalidad anunciada, el diputado por Los Ríos fue enfático. “Aquí no se trata de abultar la burocracia porque sí. Debe haber coherencia de objetivos, y eso es lo que no se percibe ni en la nueva estructura propuesta, ni en las definiciones del proyecto en sí. Una vez más creo que el Ejecutivo pone al país en un escenario difícil, complejo y sin fijar un rumbo preciso de hacia dónde quiere llevarnos en materia de educación”.
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