La Reforma Educacional que a través de la Ley de Inclusión busca colocar fin al lucro, al copago y la selección garantizando que la educación de calidad sea un derecho social para todas y todos los chilenos.
Esta iniciativa promueve el principio de gratuidad progresiva en los establecimientos subvencionados o que reciben aportes permanentes del Estado.
El 99% de los Establecimientos Particular Subvencionados de Los Ríos ya son o han iniciado los trámites para convertirse en establecimientos sin fines de lucro. Así lo informó la Seremi de Educación Erna Guerra, quien señaló que es altamente positivo que los sostenedores hayan tomado la decisión de efectuar el traspaso al 30 de junio, puntualizando que: “es altamente positivo para la región que los sostenedores se hayan dado cuenta de que la ley significa un gran avance para nuestro país, ya que coloca el énfasis en donde tiene que ser, que es asegurar que las niñas y niños accedan desde sus primeros años de vida a una educación gratuita y de calidad que produzca resultados de aprendizaje pertinentes y efectivos que les permitan desarrollar todas sus potencialidades”.
Este porcentaje, corresponde a 253 establecimientos subvencionados, de los cuales 121 ya se han transformado en personas jurídicas sin fines de lucro, cabe mencionar que a esto se suman 38 colegios ya eran personas jurídicas sin fines de lucro y no tenían copago antes de la ley de inclusión, como así también otros 8 establecimientos que contaban con personalidad jurídica sin fines de lucro, pero con copago antes de la ley de inclusión. Cabe añadir que a esto se suman 67 Establecimientos Particular subvencionados que se encuentran en proceso de adecuación y que tan solo quedan 19 colegios por efectuar este trámite, teniendo plazo para transformarse en enditad sin fines de lucro antes del 30 de diciembre del 2017.
La representante del Mineduc, añadió que esto significa que más de 38 mil estudiantes de Establecimientos Particular Subvencionados se verán favorecidos con esta iniciativa que prohíbe que los sostenedores o dueños retirar las utilidades generadas por el colegio, por lo que sólo podrán invertir los recursos recibidos ya sea por el Fisco o los padres ya apoderados sean invertidos para mejorar la calidad de la educación que se entra a nuestros estudiantes.
Al respecto, el seremi de Gobierno, Enrique Cáceres dijo que “esta es una muy buena noticia para las familias de Los Ríos, ya que con la Ley de Inclusión se materializa el sueño de toda la ciudadanía que es que la educación deje de ser concebida como un bien de consumo y se convierta en un bien público; un derecho social al cual todas y todos nuestros hijos pueden acceder sin la exigencia de un pago o de un proceso de selección. Prácticamente la totalidad de los establecimientos particulares subvencionados de nuestra región se incorporan a esta normativa, enmarcada dentro de la Reforma Educacional en marcha impulsada por el Gobierno de la Presidenta Michelle Bachelet, lo cual es un gran logro innegable porque se pone fin al lucro, a la selección y el copago en la educación, en definitiva, se pone fin a la lógica de mercado”.
Erna Guerra, además precisó que los establecimientos que realizaron este trámite seis meses antes del plazo final, podrán extender hasta 10 años sus contratos de arriendo de inmueble, en caso de no ser propietario del mismo.
Gratuidad:
Desde el 2016 a la fecha en nuestra región un total de 21 establecimientos han optado cambiar su régimen a gratuidad. Esto permite que más de 10 mil familias hayan dejado atrás la preocupación por el pago mensual de la colegiatura, siendo parte del pasado el temor de que, por no contar con el dinero necesario, sus hijos e hijas dejen de ser parte de una comunidad educativa.
Es necesario precisar que esto no significa que los establecimientos van a tener menos recursos, porque será el Fisco quien pague en lugar de las familias. Sin duda esta medida significa avanzar en equidad, porque permite que todos los niños, niñas y jóvenes accedan a una educación gratuita y de calidad sin importar la condición socioeconómica de sus padres.
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