La Cámara Chilena de la Construcción dio a conocer el informe “Infraestructura Crítica para el Desarrollo (ICD)” 2018-2027, en el cual se realiza un detallado análisis de los requerimientos en 14 sectores claves para el país, estimando en US$174.505 millones la inversión necesaria a materializar en este ámbito durante el próximo decenio a nivel nacional. Mientras que en la Región de Los Ríos se estimada se necesita una inversión de US$1.433 millones.
Cada capítulo del ICD es elaborado por consultores externos y la Gerencia de Estudios de la CChC, de modo de lograr una mirada transversal de los distintos sectores analizados: Infraestructura basal (recursos hídricos, energía y telecomunicaciones), Infraestructura productiva (vialidad interurbana y urbana, aeropuertos, puertos, ferrocarriles y logística) e Infraestructura social (espacios públicos, hospitales, cárceles y educación y resiliencia). Además, el ICD 2018-2017 incluye una sección dedicada al tema resiliencia.
“La infraestructura es clave para el desarrollo del país y de las regiones, es por ello que como asociación gremial realizamos este informe y así poder identificar los desafíos que tenemos en esta materia, como por ejemplo en el caso de la región los proyectos más necesarios se dan en el ítem Vialidad Urbana, que posee un alto impacto sobre el aparato productivo y las condiciones de vida de las personas. Históricamente ha sido una de las áreas analizadas que presenta mayor déficit de inversión” sostuvo Marcelo Guzmán, presidente de la CChC Valdivia.
Respecto a los proyectos críticos de desarrollo para la región de Los Ríos se requiere una de infraestructura por US$ 431 millones e infraestructura faltante por US$ 558 millones, es decir, en la región el requerimiento en infraestructura de Vialidad Urbana es de US$ 1.065 millones. El área de Vialidad Interurbana destaca la necesidad del proyecto Ruta acceso a Valdivia de 88 kilómetros, monto de inversión estimada de 209 millones de dólares entre 2024 – 2025. En salud destacan la necesidad de hospitales por un monto de US$ 150 millones.
En esta oportunidad, además, el ICD incorpora por primera vez un capítulo sobre resiliencia, que analiza los principales aspectos tanto para prevenir desastres naturales como para mitigar su impacto. “Nuestro país tiene condiciones geográficas que lo hacen estar permanentemente expuesto a los embates de la naturaleza. Por ello, y por las graves consecuencias que suelen acarrear en términos materiales y humanos, es que quisimos hacer este aporte”, dijo Guzmán.
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