Soraya Gutiérrez, directora Ciencia 2030 UdeC: “La producción de vacunas en Chile no es una utopía”

The doctor prepares the syringe with the cure for vaccination.

Para la decana de la Facultad de Ciencias Biológicas de la Universidad de Concepción no es una meta inalcanzable producir vacunas en Chile, asegura que está la capacidad para el desarrollo y producción, no así, los recursos y la decisión del Estado.

Es la peor pandemia de los últimos 100 años. El virus COVID-19 no sólo ha cambiado la vida de la humanidad y matado a millones de personas, también ha dejado en jaque al Sistema de Salud. Desde el mundo científico nacional, son varias las voces que se levantan para plantear la crisis como una real oportunidad.

Hace casi dos décadas Chile tenía la capacidad de producir vacunas, a través del Instituto de Salud Pública (ISP). En 2002, todo se paralizó por falta de recursos. Actualmente sólo se importan, con costos altísimos. En medio de la crisis, expertos señalan que la manufacturación es crucial. En la región, los únicos países que cuentan con plantas de fabricación, son Brasil y Argentina.

Para la Dra. Soraya Gutiérrez, Directora de Ciencia 2030 UdeC, no es una utopía producir vacunas en la Región del Biobío. “Contamos con equipos multidisciplinarios capaces de diseñar, desarrollar y probar vacunas. Nuestros investigadores ya han desarrollado prototipos y vacunas experimentales, validadas a distintos niveles (laboratorio y preclínico) demostrando eficacia y funcionalidad en diferentes modelos animales de experimentación, y en las especies de destino, para el caso de las vacunas de aplicación veterinaria”, aseguró.

Además, señala que la Universidad de Concepción, cuenta con una planta de producción a mediana escala. Se trata de la Unidad de Prototipado y escalamiento INNBIO, con condiciones para ser autorizada como laboratorio de producción de fármacos biológicos, dicha unidad cuenta con 95 metros cuadrados de capacidad instalada.

“Recientemente el Instituto de Salud Pública nos aprobó el diseño de la instalación para su habilitación como laboratorio de producción, como un primer paso para recibir el conjunto de aprobaciones necesarias para que las vacunas puedan ser probadas en ensayos clínicos en pacientes”, dijo.

Esta unidad tiene una capacidad promedio de producción de 10 mil dosis mensuales, que se estima, podría escalar a 500 mil dosis, si se incrementa el equipamiento crítico para la producción.

La Decana agrega que como complemento a estas instalaciones para la producción, “disponemos de otras instalaciones, como el Centro de Bioequivalencia, el Centro de Microscopía Avanzada y el Centro de Regional de Estudios para la Vida, como un complemento fundamental para la evaluación de las futuras vacunas a desarrollar”.

Por último, asegura que las capacidades tecnológicas e investigadores de la Facultad de Ciencias Veterinarias y la Facultad de Medicina, cerrarían el ciclo para evaluar la efectividad de las vacunas en los necesarios ensayos preclínicos en animales y clínicos en humanos.

¿Qué es lo que falta?

“Aunar voluntades desde todos los sectores a fin de cerrar las brechas de inversión y acreditación que aún nos quedan para poder implementar los procesos productivos y obtener las certificaciones del ente regulador (ISP) y así poder dar el anhelado paso de la investigación hacia la producción farmacéutica de las vacunas y su utilización en la población”, señaló.

Asegura además, que las capacidades humanas y el conocimiento están disponibles. “Estamos seguros que con el apoyo necesario podemos romper el dogma y demostrar que la producción propia de vacunas no es una utopía, ni en Chile, ni en nuestras regiones”, sostuvo.

Gutiérrez adelantó que es probable que este 2021 tengan la autorización para producir productos biológicos para pruebas clínicas en humanos.

Cory Gómez G. / Comunicaciones Ciencia 2030 / Universidad de Concepción

4 lecturas