Diversos estudios científicos han demostrado la importancia de las abejas y su rol en los ecosistemas como polinizadores. No solo tienen la capacidad de producir alimentos tan nutritivos como la miel, además desempeñan un papel imprescindible para el equilibrio ecológico en la naturaleza y para la vida humana.
Andrea y Daniel, son un matrimonio penquista que producto de la pandemia tuvieron que reinventarse, y hoy, gracias a programa de la Municipalidad de Concepción, se formaron como apicultores urbanos y tienen su propio apiario en el patio de su casa, cerca de la Plaza Condell.
“Yo trabajaba en confección y debido a la pandemia todo esto ha ido bajando así que ahora estamos en este nuevo emprendimiento, la municipalidad impartió un curso y fuimos invitados a participar, estábamos en busca de y justo se dio la oportunidad de tomar este curso (…) Súper buena la experiencia, enriquecedora y motivante ha sido súper buena la experiencia de trabajar con las abejitas” comentó Andrea Cuitiño Gómez.
“Es algo fenomenal, bonito yo no tenía idea de esto y de repente nos empezamos a meter, algo que no tiene nombre, es súper enriquecedor (…) el objetivo es llegar a tener unas 10 cajitas, unas diez familias de abejas” añadió Daniel Vivanco Caamaño
Una actividad que antes era casi exclusiva de sectores rurales hoy también puede desarrollarse en la ciudad. En el caso de Concepción y el marco del programa “Salvemos las Abejas” de la Dirección de Medio Ambiente del municipio, se realizó el curso “Iniciación a la Apicultura Urbana” donde se capacitó a la comunidad y se les entregó núcleos para que inicien su trabajo como apicultores.
“Nosotros a través de la Dirección de Medio Ambiente hemos trabajado diferentes temáticas que muchas veces la gente no relacionaba con la labor municipal, es así como certificamos el primer curso básico de apicultores y apicultoras de la ciudad de Concepción de distintos sectores de la comuna, hemos sido capaces de convocar a personas que se atrevieron a conocer este fascinante mundo de las abejas , de la miel el alimento más completo que uno puede tener y que lo pueden producir en sus propias casa” destacó el alcalde de Concepción, Álvaro Ortiz Vera.
Las abejas se están muriendo en el mundo, pero en la ciudad parecen tener una nueva oportunidad de sobrevivencia, tienen floración variada y por lo tanto la posibilidad de estar bien alimentadas.
“La verdad tengo mucho cariño por las abejas, estudie investigación en apicultura sobre todo en prebióticos para abejas pero nunca había tenido la instancia de tener abejitas, solo en la investigación y eso también dio paso a que pudiera conocer a don Freddy, participar de ese taller y tener estas abejas y aportar dentro de la ciudad porque eso es una cosa fundamental que tenemos que impulsar y desarrollar” manifestó Jorge Rocha Seguel, vecino de Pedro de Valdivia.
Ser apicultor en la ciudad no es una tarea fácil, sin embargo, el municipio penquista ha logrado motivar a varias vecinas y vecinos a través de charlas y talleres, además del trabajo que realizan en el apiario municipal inaugurado el año 2017.
“Tenemos muchos vecinos motivados, ponen flores, en sus jardines, árboles frutales, ornamentales, otros hacen huertas, hay una variedad increíble de flores que hacen atractivo para las abejas para su dieta para su bienestar, toda la variedad de polen hace que ellas puedan vivir sin inconvenientes, porque están bien nutridas, cuando hay una variedad de flores pueden tener una vida más larga, más plena y producir harta miel que es lo que nos interesa” señaló el Encargado del Apiario Municipal, Freddy Toledo Romero, quien realiza monitoreo constante de los núcleos entregados a la comunidad.
Ante una eventual extinción de estos insectos y las graves consecuencias que esto significaría el municipio busca impulsar una política de protección y preservación, además de apoyar a quienes se aventuren como productores de miel en la capital regional.
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