Así lo señalaron mediante comunicado público que reproducimos a continuación.
En la Universidad Autónoma de Chile, sede Temuco, desde hace más de tres semanas los estudiantes nos hemos movilizado y votado para paralizar las actividades académicas expresando así nuestro sentir con el estallido social y presionar a nuestros directivos con diferentes petitorios en las respectivas carreras.
En uno de los días de movilización, en forma de protesta, entramos a las dependencias del edificio de vicerrectoría para conseguir mayor atención de parte de las autoridades de la Universidad.
Ante lo anterior, se tiene positiva respuesta de parte del señor Emilio Guerra Bugueño, actual vicerrector de nuestra casa de estudios. Este último hace un llamado a dialogar con los presidentes de los respectivos centros de estudiantes de la Universidad.
Es por eso que se crea el “Consejo de Centros de Estudiantes”, que logra que vicerrectoría acepte y autorice la paralización de actividades, respetando movilización sin que se realicen cátedras ni evaluaciones regulares.
El día martes 19 de noviembre se efectúa la votación a “paro” a nivel Universidad, en la que participó el 48% del total de los estudiantes con matrícula al día, resultado que corresponde al 59,32% de votos a favor y 40,54% en contra de la paralización.
El día miércoles 20 de noviembre vicerrectoría llama a reunión al Consejo de Centros de Estudiantes. A esta reunión asiste el vicerrector, sus asesores, los directores de las carreras y Jaime Ribera, actual secretario general de la Autónoma, enviado de la sede de Santiago, quien de forma prepotente, intimida a los miembros del Consejo diciendo que este “no tiene legitimidad” y que la votación a paro no tendrá valor, agregando que perseguirá “uno por uno” a los estudiantes que estén causando revuelo, pudiendo “abrir sumarios en su contra”.
Estas acciones son algunas de las medidas que ha tomado la casa de estudios para reprimir, perseguir e intentar poner freno a las movilizaciones. Asimismo, existen denuncias de cierre de salas y espacios para evitar la organización estudiantil.
Por otro lado, las intimidaciones no se agotan por parte del vicerrector y Jaime Ribera, sino que también se han extendido a parte de autoridades administrativas y académicas de diversas carreras.
Como colectivo de estudiantes condenamos el actuar de esta persona, que llega desde Santiago a romper esquemas en regiones así como acuerdos previos entre el Consejo de Centros Estudiantes y el vicerrector Emilio Guerra, a quien se le quitó autoridad, y quien, por lo demás, no tomó postura alguna, haciendo un llamado a retomar las actividades académicas el día lunes 25 de noviembre.
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