Vicepresidente del Senado consideró lamentable la resolución del Tribunal Constitucional que permite el lucro en educación superior: “Se daña la democracia cuando un organismo que se supone técnico opera en función de convicciones políticas. El Gobierno del presidente Piñera tiene minoría en el Congreso, pero hoy hemos sido notificados que se puede colegislar con una minoría de adherentes en un órgano que debería ser técnico”.
Desde Puerto Natales, donde se encuentra realizando actividades propias de su función de senador por la Región de Magallanes, el vicepresidente del Senado, Carlos Bianchi, rechazó la resolución dada a conocer hoy por el Tribunal Constitucional en cuanto a declarar inconstitucional el artículo 63 de la Ley de Educación Superior votada en el Congreso, que prohibía a las universidades incluir entre sus sostenedores a personas o instituciones con fines de lucro.
Según Bianchi “lo que ha hecho hoy el Tribunal Constitucional es simplemente actuar como un órgano colegislador, modificando la voluntad expresa expresada por el Parlamento en su conjunto, distorsionando y abusando de su rol como instancia de revisión de constitucionalidad”.
“Digámoslo con claridad -agregó Bianchi- hoy el Gobierno del presidente Piñera nos ha notificado que siendo minoría en el Parlamento puede colegislar en una verdadera tercera cámara, en la que circunstancialmente tiene una mayoría política, no técnica. Esta situación le hace un grave daño a la democracia. Lo que corresponde, es que si los miembros del Tribunal Constitucional desean ser legisladores y manifestar preferencias políticas, lo sincero y lo ético es que se presenten a las elecciones, hagan campaña y sean parlamentarios, no que disfracen una preferencia política como una decisión técnica”.
El vicepresidente del Senado señaló que esta situación abre sin duda un debate sobre la necesaria reforma al Tribunal Constitucional, “no podemos aceptar que el debate legislativo en el Congreso, propio de una democracia, pierda relevancia. En todas las democracias del mundo los TC actúan de forma excepcional y solo ante atentados graves y flagrantes a la Constitución. Creo que los ministros del TC están desvirtuando la institucionalidad democrática. A través de este fallo, el Gobierno está legalizando el lucro en educación, cuando la mayoría del pueblo a través de sus parlamentarios ha dicho que desea lo contrario”.
“El problema de fondo lo vamos a tener que tratar en el Senado. Esto es, reformar las amplias y negativas atribuciones que en la actual Constitución tiene el tribunal Constitucional, una institución que ha queda añeja para una democracia real del siglo XXI. Una entidad que es fruto de un cuoteo político y que no representa la voluntad popular”, remató el senador Bianchi.
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